Sydney: la mejor ciudad del mundo para vivir

Después de pasar dos días en Melbourne, pusimos rumbo a Sydney (en español Sídney). Según varios estudios, Melbourne es una de las mejores ciudades para vivir. Sin embargo, yo considero que Sydney es la mejor ciudad del mundo para vivir. 

Nuestro avión salía a las 6 de la mañana, por lo que tuvimos que pasar la noche en el aeropuerto, verdaderamente no se lo recomendaría a nadie. A las 8 de la mañana nos plantamos en Sydney y pusimos rumbo a nuestro backpacker (albergue mochilero). Sinceramente, el sitio más cutre, viejo, sucio y feo que he estado en mi vida. Claramente las fotos que vimos por internet al reservarlo no tenían nada que ver con la realidad.

Os pondré un ejemplo, nada más llegar la chica de recepción estaba sentada en una silla y estaba usando como cojín nuestras sábanas supuestamente limpias. Nos comentó, entre risas, que aun no había tenido tiempo de arreglar la habitación. Sin embargo nos dijo podíamos subir y luego ella ya vendría a hacer la cama con las sabanas en las que estaba sentada. En fin, lo único bueno que tenía nuestra habitación eran las increíbles vistas de la ciudad.

Pero bueno, pasamos a lo importante: la ciudad. Me sorprendió bastante la increíble tranquilidad de la ciudad pues me la esperaba muy ajetreada y estresante, pero todo lo contrario. Sus grandes parques en los que la gente paseaba y hacía deporte, la Opera House y su ambiente alegre me conquistó.

En tres días nos dio tiempo suficiente a recorrer las zonas más importantes y visitar un par de museos​. Sin embargo, me quedé con la espinita de haber vivido algún tiempo ahí. ¿Quién sabe si en el futuro?

Para que os conquiste a vosotros también esta ciudad, vamos allá con una selección de fotos de la ciudad.

Opera House. Uno de los edificios más famosos y distintivos de Sydney. En su interior se realizan obras de teatro, ballet y como su propio nombre indica, óperas. Me sorprendió ver que está formado por tres edificios independientes, de lejos parece solo uno. También, pude comprobar como los edificios están recubiertos de azulejos independientes. De hecho, más de un millón de azulejos componen esta obra de arte.

Sunset. Uno de los mejores atardeceres que se puede contemplar. A un lado el Harbour Bridge, al otro la Opera House y por el medio terrazas repletas de gente tomando cócteles y, además, cruceros navegando en el mar. Indiscutiblemente la mejor ciudad del mundo con el mejor atardecer. ¡Simplemente increíble!

Darling Harbour. Relajante lugar en el que nos sentamos a tomar un chocolate calentito, ya que con el frío que hacía se agradecía estar sentado al son tomando algo para coger energía. Posteriormente, también aproveché para sacar fotos para mi Instagram 😛 

Asylum Sydney. Como os comentaba antes, lo mejor de la habitación donde me alojé eran esencialmente las vistas, porque otra cosa no.

China Town. Como todas las ciudades allá donde vayas, siempre hay un Chinatown. Para mi son todos básicamente iguales, par qué nos vamos a engañar. En cualquier caso, siempre tiene encanto visitarlos.

¿Estamos en Londres? Como cuenta la historia, Sydney fue conquistada por los británicos, como resultado que muchos elementos de la ciudad recuerden a UK. Sin ninguna duda, para mi, este reloj se da un ligero aire al Big Ben de Londres, y el autobús rojo pasando ya lo clava.

Escaleras mecánicas de madera. ¿Estamos ante una nueva era? 

Bondi Beach. Un must para hacer en Sydney es recorrer el paseo que recorre los acantilados y las playas desde Coogee a Bondi Beach. Unos aproximadamente 6 km que se hacen muy cortos a pesar de ir parándose cada 5 minutos a contemplar sus miradores. Posteriormente, para terminar el paseo, ¡esta increíble playa!